Ucrania clamó este viernes nuevas victorias en el marco una contraofensiva lanzada en el este del país, lo que obligó a Rusia a enviar refuerzos al frente de Járkov en un intento de frenar el avance ucraniano.
"Desde el 1 de septiembre hemos liberado 1.000 kilómetros cuadrados de nuestro territorio", dijo el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, en su discurso diario sobre la situación en el campo de batalla.