El oficialismo y la oposición en Argentina cruzaron fuertes acusaciones de generar violencia este lunes por las manifestaciones frente a la casa de la vicepresidenta, Cristina Fernández, tras el pedido de condena de un fiscal en una causa de corrupción, y donde se produjeron disturbios con la Policía.
El ministro de Seguridad de la ciudad de Buenos Aires, que es gobernada por la oposición al Gobierno nacional, Marcelo D’Alessandro, dijo este lunes en declaraciones radiales que no le “va a temblar el pulso para usar la fuerza pública cuando tenga que hacerlo para recuperar la paz social”.