Campañas de desprestigio en medios, vigilancia en vídeo o electrónica, condenas por delitos como la violación, intimidación a testigos, violencia física y amenazas a familiares son las seis "tácticas" que, según Human Rights Watch (HRW), usa Marruecos para acallar a los disidentes.
Tras dos años de investigación, con casi 90 entrevistas a personas dentro y fuera de Marruecos y el análisis de ocho casos de acoso contra disidentes y 22 más de personas ligadas a ellos, la organización publica hoy su informe "Te cogerán, pase lo que pase: el libro de tácticas de Marruecos para reprimir la disidencia".