Jóvenes de la franja de Gaza, aislados del mundo por el bloqueo impuesto por Israel desde 2007, apaciguan su sensación de encierro dejándose llevar por las olas del mar con el surf, un deporte que estos últimos años ha ganado adeptos en la franja.
Con tablas viejas y destartaladas, chicos palestinos salen casi cada día a surfear.
Aprovechan los largos meses de sol, las altas temperaturas y uno de los pocos espacios del enclave donde pueden entretenerse y sentirse libres, las aguas del Mediterráneo.