El Gobierno de Luis Arce rechazó este miércoles el informe de Estados Unidos sobre derechos humanos y lo consideró una "intromisión" por las observaciones que hace sobre el proceso judicial que se sigue a la expresidenta interina Jeanine Áñez a instancias del oficialismo boliviano.
La Cancillería boliviana emitió un comunicado en el que "rechaza categóricamente la intromisión de terceros países" y el informe "unilateral" sobre derechos humanos del Departamento de Estado estadounidense que se difundió en la víspera.