La preocupación por el crecimiento de casos de agresiones sexuales por sumisión química usando el nuevo método del "pinchazo" preocupa en España, en especial en la región de Cataluña (noreste), donde en las últimas semanas se han disparado el número de denuncias.
Los datos hablan por sí solos: entre el 1 de enero y el 12 de junio de 2022 se habrían producido solo en Cataluña 288 casos de este tipo, 167 por sumisión química y 121 por vulnerabilidad química, a los que hay que sumar 17 denuncias de los últimos días ante la policía autonómica catalana.