Alcanzar la jefatura de Estado o un escaño en el Congreso es un asunto de familia en Filipinas, uno de los países en el mundo donde las dinastías acumulan más poder político y económico.
Tras arrasar en las elecciones del pasado mes, Ferdinand "Bongbong" Marcos Jr. y Sara Duterte consolidan la hegemonía de los clanes políticos, cuyo poder omnipresente solo ha aumentado en las últimas décadas en el país.