El papa Francisco aseguró que "la puerta está abierta" a su posible renuncia al pontificado, aunque aún no ha pensado en esa posibilidad, y agregó que no sería "una catástrofe", durante la rueda de prensa en el vuelo de regreso de su viaje de seis días a Canadá.
El pontífice argentino abordó en varias ocasiones durante la rueda de prensa esta cuestión, así como sus limitaciones físicas, debido a que tiene que moverse en una silla de ruedas por su problema en la rodilla que le impide caminar y estar mucho tiempo de pie, como ha ocurrido en Canadá.