Los rayos secos, llamados así porque el agua que los acompaña se evapora antes de llegar al suelo, han provocado parte de los incendios forestales más destructivos y costosos en la historia de California, según un estudio publicado este lunes.
Investigadores de la Escuela de Medioambiente de la Universidad Estatal de Washington, en Vancouver, que evaluaron datos de 1987 a 2021, descubrieron que casi la mitad de los rayos que cayeron al suelo en el centro y el norte de California durante la primavera y el verano en ese periodo de tiempo habían sido secos.