El Pentágono restó este miércoles importancia al lanzamiento de prueba por parte de Rusia de un misil balístico intercontinental, con capacidad de llevar una carga nuclear, y afirmó que fue avisado por Moscú con antelación.
El portavoz del Departamento de Defensa de EE.UU., John Kirby, dijo en un comunicado que "este tipo de test es rutinario y no fue una sorpresa".