Puerto Rico afronta la temporada de huracanes 2022, que se prevé muy activa, con la incertidumbre de si el sistema eléctrico está preparado para el paso de tormentas tropicales, mientras crece el descontento por los cortes e incremento del precio del servicio.
La nueva temporada ciclónica en la región, que comenzó oficialmente esta semana, supone un reto para la isla, cuya infraestructura eléctrica genera dudas por los frecuentes apagones, que vivieron su peor episodio con uno general ocurrido a principios del pasado abril.