El presidente francés Emmanuel Macron, en visita oficial en Argel, defendió este viernes la celebración de un partido amistoso entre Francia y Argelia, que disputaron por última vez hace más de dos décadas, para "conciliar" los dos países que dejan atrás un año de fricciones diplomáticas.
El encuentro, que tuvo lugar en octubre de 2001 en París, fue cancelado después de que los hinchas argelinos invadieran el campo de juego en el minuto 76 y con el marcador 4-1.
Una iniciativa que ha sido evocada en varias ocasiones por el seleccionador de los "Fenecs" (apodo de la selección magrebí), el franco-argelino Djamel Belmadi.