Un tribunal de apelaciones detuvo temporalmente la orden judicial que obligaba al senador republicano Lindsey Graham a declarar sobre el presunto intento del expresidente de Estados Unidos Donald Trump de invalidar las elecciones de 2020.
Graham había apelado a la orden por la que debía testificar el 23 de agosto ante un gran jurado del estado de Georgia sobre presuntas llamadas telefónicas que realizó a funcionarios electorales de ese estado.