El estado estadounidense de Indiana se convirtió este jueves en el primer territorio del país en el que entra en vigor una ley contra el aborto redactada y aprobada tras la decisión del Tribunal Supremo de eliminar la protección constitucional a la interrupción del embarazo.
La ley prohíbe todos los abortos salvo en algunas excepciones, como en casos de violación, incesto, o cuando existen complicaciones médicas.