Estados Unidos elegirá en noviembre a los nuevos miembros del Congreso y, solo viendo la campaña, una cosa es segura: el "sur profundo" del país está viviendo una revolución con un número récord de candidatos afroamericanos que tiene más posibilidades de ganar que nunca.
Es más, esos candidatos del Partido Demócrata se han propuesto arrebatar a los republicanos uno de sus principales bastiones con la movilización de votantes que nunca antes han acudido a las urnas.