Las relaciones con Venezuela y la búsqueda de la paz con apoyo internacional ocupan un lugar prioritario en la agenda del presidente electo de Colombia, Gustavo Petro, que desde antes de asumir ha conseguido los primeros avances en ambos propósitos.
Petro, que será investido como el primer presidente de izquierda en Colombia el próximo 7 de agosto, ha hecho una apuesta por restablecer las relaciones diplomáticas con Venezuela que fueron rotas el 23 de febrero de 2019 por el presidente de ese país, Nicolás Maduro, así como por retomar las negociaciones de paz con la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) suspendidas desde mediados de 2018.