Los 659 inmigrantes salvados hace nueve días en el Mediterráneo central por el barco Geo Barents, de Médicos Sin Fronteras (MSF), pusieron fin este jueves a su larga espera y desembarcarán en Italia, donde el debate migratorio centra una encendida campaña electoral.
"La asignación de un puerto fue recibida con gran alivio sobre todo por los supervivientes", declaró a Efe el coordinador de las operaciones de rescate de MSF en el Mediterráneo, Juan Matías Gil.