Medio centenar de grupos civiles pidieron este jueves al Departamento de Justicia y a las autoridades de Nueva York que investiguen el supuesto uso de la vigilancia artificial para vigilar las conversaciones en las prisiones estadounidenses por considerar que se está empleando indebidamente para grabar reuniones entre presos y sus abogados.
"Estos abusos exigen una intervención urgente del Departamento. En consecuencia, solicitamos una investigación independiente sobre estas tecnologías de vigilancia", aseguraron en un comunicado.