El expresidente de Honduras Juan Orlando Hernández, dijo este lunes que es "inocente" de los cargos que le imputa Estados Unidos, asociados al narcotráfico y uso de armas, que confía en la justicia y presagia que podría ser condenado a tres cadenas perpetuas y convertirse "en un muerto en vida".
"Soy inocente, soy víctima de una venganza y una conspiración.
Estoy seguro que Dios me hará justicia", indicó Hernández en una carta escrita por él, que hoy difundió su esposa, Ana García, en Tegucigalpa.